Cuando pase el temblor

Hace unos días, hubo un terremoto en Lorca, Murcia. Fue terrible, no solamente por lo que significa sentir que la tierra se mueve, sino porque en España hacía más de 50 años que no había un terremoto de esa magnitud, y más de 100 años en el que no había uno con víctimas mortales.

Parecía increíble ver en las noticias algo tan cercano destruído completamente. Familias enteras en campamentos improvisados, desesperados, y tristes, muy tristes. Tristes ellos y también, sin que la comparación roce el agravio, tristes nosotros. Ver esa escena no puede impedir que se te caiga un lagrimón.

Hoy todos nos acordamos de ellos, pero dentro de unas semanas o (como mucho ) unos meses nos olvidaremos. Ellos seguirán con sus trámites, con la burocracia que intentará ponerles zancadillas, y con la reconstrucción de su pueblo. Y nosotros en la ignorancia, que se antoja deliciosa cuando de evadir el dolor se trata. Espero que eso no suceda, pero para eso sólo podemos recordarlo. Quizás lo escribo para eso. Para que cuando algún seguidor del blog repase entradas viejas lo vea y, al menos piense un momento en lo que sucedió.

Hoy rezo por esas nueve personas que ya no están, y por esas familias que se quedan no sólo sufriendo por la pérdida de un ser querido, sino además sin casa, sin cosas y con poco tiempo para llorar.

Hoy os pido a todos que no nos olvidemos de lo que ha pasado. Hoy todos somos lorquinos.

Nota: El título de este post es un tema de Soda Stereo "Cuando pase el temblor" lo podeis ver y escuchar AQUI